Empezaremos respondiendo con otra pregunta: ¿verdad que el zumo de cualquier fruta es saludable? Pues eso mismo es el aceite: zumo de aceituna. Y ese líquido que se obtiene de una extracción en frío, que no lleva ningún producto químico añadido y al que todos llaman oro líquido (y con razón), tiene infinidad —repetimos: in-fi-ni-dad— de propiedades saludables. Centenares de estudios avalan su fama de producto sano, sano, sano… Por ejemplo:
1. Contiene antioxidantes naturales que fortalecen el sistema inmunológico.
2. Sus grasas saludables ayudan a disminuir la presión arterial y regulan los niveles de azúcar en sangre y la producción de insulina (¡menudo aliado contra la diabetes!).
3. Mejora la digestión y el tracto del intestino grueso.
4. Aporta defensas contra el infarto de miocardio.
5. Su ácido oleico ayuda a prevenir algunos tumores, como el de mama.
6. Mejora el colesterol bueno y reduce el malo.
7. Al tener propiedades antiinflamatorias, alivia los dolores articulares.
8. Retrasa el deterioro mental y previene enfermedades como el Alzheimer gracias a sus grasas monoinsaturadas.
¿Verdad que suena lo bastante saludable como para que salgas YA a comprar un litro de aceite?