¿Qué? ¿Con un solo alimento? ¿Es eso cierto? Pues sí, lo es. El aceite de oliva virgen extra puede cambiar tu vida y mejorar notablemente tu dieta.
¿Cómo? Aquí tienes cinco consejillos.
- ¿Desayunas cada día pan con mantequilla? Sustitúyela por un chorrito de aceite de oliva virgen extra –cuyas grasas son cardiosaludables, al contrario que las de la mantequilla– y una pizca de sal.
- ¿No te gusta la verdura? Prueba a cocinarla al vapor y aliñarla un chorro de aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal; luego hablamos.
- ¿Tu cuerpo te pide un postre goloso? Pan, aceite y chocolate; no necesitas más.
- ¿Te atreves a echarle un chorrito a tus smoothies verdes? ¿No? ¡Pues no sabes lo que te pierdes!
- ¿Tienes invitados y no sabes qué ofrecer de aperitivo? No te devanes más los sesos. Un buen pan y un buen aceite de oliva virgen extra y tocarán el cielo con las manos.
