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¿Conoces los tipos de pasta que hay?

26 octubre 2015

La cocina de pasta es una de las más populares y exportadas del mundo. Desde su querida Italia ha viajado en forma de espagueti o macarrón, acompañada de pesto o boloñesa, a países donde incluso se han fusionado con la gastronomía local.

Seguro que la pides y la preparas pero, ¿qué sabes de ella? Por ejemplo, ¿cuántos tipos de pasta conoces? ¿Sabes cómo se clasifican? Para empezar diremos que hay dos grandes grupos: pasta larga y pasta corta. Los espaguetis son los reyes del primero y los macarrones del segundo.

Las pastas largas pueden ser en forma de cinta o en forma de cordel y, entre ellas, reconocerás nombres como linguine, fettuccine, papardelle, tagliatelle (cuatro cintas de diferente grosor), capelli d’angelo (fideos muy finos) o bucatini (más gruesos que los espagueti y vacíos en el interior). Las podrás encontrar secas o frescas, otra de las grandes clasificaciones de las pastas. En este último grupo, las frescas, es común dar con los populares formatos rellenos como ravioli o tortellini.

Por su parte, las pastas cortas son, como es de esperar, las de pequeño tamaño. No se enrollan y presentan diferentes formas; desde pajaritas o mariposas (farfalle) a espirales (fusilli) o tubos (penne).

Y ahí no queda la cosa. Hay tantos tipos de pastas como para que se pudiera comer uno diferente cada día del mes. Y si los combinamos con salsas… la variedad es casi inagotable.

Aunque bien es cierto que los puristas no consentirían matrimonios aleatorios. Por ejemplo, la pasta corta va bien con salsas que sean de consistencia espesa; salsas cremosas y queso para aquellas variedades con huecos en su interior (penne, macarrón,…); salsas ligeras y frescas para los espagueti y fuertes o de toque picante para las que son en forma de cinta.

Las pastas largas para salsas que se puedan apreciar bien en un bocado enrollado y las cortas acompañadas de verduras u otros ingredientes en trozos que se puedan pinchar bien con el tenedor. ¿Que no sigues estás normas? Pues adelante. En esto de la cocina no hay nada que no se pueda reinventar.

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