Hay varios detalles a tener en cuenta a la hora de escoger una calabaza para Halloween, antes de decorarla a tu antojo para hacer de ella un ente absolutamente terrorífico. ¡Ay, mamita!
La forma
Que sea redondita y resultona, de forma regular. Evita las calabazas alargadas o con irregularidades.
El tacto
Toquetea tu calabaza sin miedo: si presenta puntos blandos, deséchala, pues tiene que ser dura y consistente. Lo mismo ocurre con los cortes o las manchas irregulares. Si encuentras alguna… ¡bye-bye, calabaza!
La estabilidad
Ni se te ocurra llevártela sin antes haberte asegurado de que es perfectamente estable y se sostendrá sobre cualquier superficie. ¡Que luego no haya sustos!
El tallo
Mejor escoger una calabaza sin tallo, o asegurarte de no cogerla nunca por él en el caso de que lo tenga, ya que pueden dañarse.
El color
Es fundamental que la calabaza tenga un color encendido y uniforme, sin manchas verdes o blancas.
La conservación
Para conservarla durante el mayor tiempo posible, guárdala en un ambiente fresco, seco y sin humedad una vez llegues a casa.