Si hay un concepto que deberíamos eliminar de nuestro imaginario en relación con la comida es la culpabilidad. Basta ya de pasarnos la vida sufriendo. Por esa pizca de chocolate con el café (incluso por el propio café), por el cruasán del domingo o por haber comido algo más que dos hojas de lechuga para cenar. Muchas personas con un peso saludable se dedican a contar calorías por miedo a perder la batalla contra la báscula, mientras que el sentido común y la dieta mediterránea nos dicen a gritos que no hemos venido a este mundo a pasarlo mal. Y que las básculas, sean de cocina o de suelo, deberían ser objetos no gratos en nuestro hogar.
Así pues, el secreto es llevar una alimentación equilibrada y saludable, con una ingesta de calorías diarias proporcionada. Si a ello le sumamos una actividad física regular y un consumo de grasas saturadas limitado, podremos cenar pasta a menudo y disfrutar de su sabor y sus numerosas propiedades. Estas ideas para cocinar pasta por la noche van a cambiar tu vida. Son sabrosas, ligeras y fáciles: nada que ver con las salsas y las guarniciones calóricas e indigestas. ¿Te animas?
Ensalada
Un puñado de pasta, rúcula, tomates cherri, zanahoria, rabanitos, frutos secos y un chorro de aceite de oliva virgen extra. ¿A que no hay nada más rico?
Con tomate y albahaca
Es un clásico italiano que siempre funciona, especialmente a la hora de cenar, cuando no nos apetecen platos muy copiosos ni con muchos ingredientes. Si todos los productos son de la mejor calidad, la felicidad está servida.
Con verduras
Un salteado de verduras en la sartén o el wok para aprovechar todas las que tengamos en la nevera. Si lo mezclamos con una buena pasta al dente, tendremos un plato perfecto para cenar, ligero y muy nutritivo. ¿Has pensado, además, que si preparas un poco de sobra te lo podrás llevar en la fiambrera al día siguiente? Si es que todo son ventajas…
Con marisco
Esta receta es ideal para darnos un homenaje también en casa, que bien nos lo merecemos. De hecho, precisamente al caer la noche y encontrarnos a gusto en nuestro ambiente es cuando más nos apetece disfrutar de una buena comida, solos o en familia. Nada mejor que pasar por la pescadería, hacernos con algo de pescado y marisco (langostinos, almejas, gambas, mejillones…) y prepararnos una delicatessen que, acompañada de una pizca de parmesano rallado, será canela fina.
All’aglio e olio
Un clásico italiano que nunca falla: un buen aceite de oliva virgen extra, unos ajos, unos espaguetis… ¡y listo! Un plato irresistible y 100% cardiosaludable.
