Las ventajas de la cocción al vapor son infinitas. En primer lugar, al tratarse de una cocción muy poco agresiva los alimentos mantienen todas sus propiedades organolépticas y conservan intactos sus nutrientes.
No hay nada más sano, pues, que adquirir un buen manojo de verduras de temporada —que encontraremos en su máximo esplendor, con toda una explosión de sabores y aromas para nuestro plato—, colocarlas en la vaporera y esperar unos minutos a que estén listas, procurando siempre que queden ligeramente al dente. Una opción de lo más fácil para el día a día: verduras multicolores que, una vez frías, podremos convertir en deliciosas ensaladas. ¿Se puede pedir más?
¿Cómo aliñar tus verduras al vapor? Hay mil maneras de hacerlo:
- Puedes sofreír un ajo con un chorro de aceite de oliva virgen extra y rehogar luego las verduras para que adquieran sabor.
- O añadir el chorro de aceite directamente por encima, en crudo, con un toque de sal y pimienta y especias a tu gusto.
- O elaborar una vinagreta, con un toque de miel y mostaza o zumo de limón, en el caso de que hayas decidido apostar por una riquísima ensalada.
¿Un truquito si apuestas por brócoli o la coliflor para tus cocciones al vapor? Nunca tires los tallos: córtalos en finísimas láminas y añádelos a tus ensaladas.
