1. Macera los higos secos Borges en el armagnac. Saca la mantequilla y el foie de la nevera, córtalos en cubitos y déjalos a temperatura ambiente. Retira la grasa de los confits y resérvala en un bol. Deshilacha la carne del confit y mézclala delicadamente con la cebolla frita y el foie.
2. Para elaborar el crumble, mezcla en un bol la harina y la mantequilla. Escurre los higos secos Borges, córtalos en cuartos y añádelos al bol. Espolvorea con una pizca de nuez moscada y mezcla todo de nuevo.
3. Calienta el horno a 190º. Cubre la bandeja con papel de horno. Dispón 4 moldes redondos (o 4 cazuelitas de horno individuales) y engrasa el interior con la grasa del confit. Reparte la mezcla de confit sin rebasar los 2/3 de altura de los moldes. Llena el resto con el crumble de higos y dora en la parte media del horno.
4. Una vez fuera, acompaña los platos con unos brotes tiernos de ensalada sazonados con la crema balsámica de frambuesa Borges.