Una receta muy sencilla que solo conlleva 5 minutos de preparación y el resto en la nevera y al baño maría. No tendrás que pasarte la tarde en la cocina y, lo mejor de todo, ¡a tus invitados les encantará!
Una receta muy sencilla que solo conlleva 5 minutos de preparación y el resto en la nevera y al baño maría. No tendrás que pasarte la tarde en la cocina y, lo mejor de todo, ¡a tus invitados les encantará!
Desmenuza las galletas y mézclalas con el aceite de oliva virgen extra hasta obtener una masa consistente. Extiéndela en la base de un molde y déjala enfriar en la nevera.
Mezcla en un bol el queso, el yogur, la bebida de nuez, el azúcar y las yemas de huevo. Cuando tengas una mezcla homogénea, incorpora las claras a punto de nieve y bate con movimientos suaves y envolventes.
Vierte la mezcla en el molde, sobre la galleta, y cocina el cheesecake durante unos 30 minutos al baño maría, a fuego bajo.
Déjalo enfriar y recúbrelo con mermelada de frambuesa.